Por: Roxana Ortiz A.

Los pobladores, especialmente aquellos que viven cerca de una planta envasadora de gas, forman largas colas para adquirir un balón de gas y en muchos de los locales, solo aparecen letreros que dicen “no hay gas”.

POR APLICATIVOS HAY REPARTOS

Pero por lo menos hasta ayer, si uno llamaba a las empresas conocidas para que les lleven un balón de 10 kilos hasta sus hogares lo hacían sin ningún problema a 55 soles, dependiendo la lejanía de la dirección.

Había personas en la cola que decían que hace varios días no tenían gas, por lo que optaron por la leña que conseguían en los basurales, en las chacras, en la rivera del río o finalmente comprando en los mercados. El atado de leña hasta el viernes pasado estaba en 4 soles; pero en algunos sectores se incrementó en dos soles más.

Cuando los usuarios acuden a comprar directamente a las plantas envasadoras, obtienen un precio de 5 a 7 soles menos, de ahí el interés para esperar pacientemente por horas para recargar su balón de gas.

En algunos casos, han sido los comerciantes quienes formaban las colas con varias personas, sus hijos incluidos, para luego revenderlos, hasta en más de 80 soles. En las empresas se colocaron letreros que decían que no se iba a vender gas a los menores de edad.

Un panorama similar ocurre en las estaciones de servicio que hasta ayer tenían gas, largas colas de taxistas esperaban para llenar el tanque. En algunos grifos se llegó a subir el gas hasta los 10 soles, mientras que en otros mantenían precios más bajos, desde 7.45 soles.

Desde que se produjo el bloqueo de carreteras por las protestas contra el gobierno, es que se produjo el desabastecimiento del combustible, tanto para los vehículos como para las cocinas.

“Lo que pasa es que normalmente se tenía una reserva en los tanques, de un cuarto o hasta la mitad antes de una nueva provisión; pero debido al cierre de carreteras se agotaron todas las reservas y eso ha ocurrido con todos los grifos, por lo que los camiones cisternas que transportan el gas no se dan abasto para repartir a todos a la vez, porque los conductores para prevenir la falta de gas, llenan sus tanques y rápidamente se termina”, explicó el trabajador de un grifo en Umacollo.