Por: Paola Bustamante Suárez – Directora de Videnza

VIDENZA INFORMA

Hace unas semanas Videnza presentó los resultados del Estudio para el mapeo de procesos del Registro Integral de Formalización Minera – REINFO, encargado por el Instituto de Ingenieros de Minas.  En esta presentación se identificó que lamentablemente desde el año 2017, que se crea el REINFO, no se tienen resultados, los números así lo demuestran. Conforme a la información publicada en el portal del Ministerio de Energía y Minas, al día de hoy se tienen 84 462 inscritos en el REINFO, de los cuales 65 317 (77,3%) se encuentran en estado de suspendido y 19 145 (22,6%) se encuentran en estado de vigentes. Asimismo, en el mes de setiembre del año en curso, el Ministerio de Energía y Minas – MINEM informó que sólo 2081 mineros inscritos en el REINFO habían logrado formalizarse y 4598 habían sido excluidos.  En el caso de Arequipa, los datos no son distintos, son 16 249 inscripciones en el REINFO, que representan el 19,2% del total de inscripciones a nivel nacional. De estos 16 249 registros, sólo el 24,2% (3932) registros se encuentran vigentes y el 75,8% (12 317) se encuentran suspendidos.

Estos datos, tanto nacionales como en el departamento de Arequipa,  nos demuestran que el proceso no ha sido el adecuado para promover la formalización y/o que gran parte de los inscritos no desea formalizarse realmente, sino beneficiarse de lo que le permite el REINFO y sus normas complementarias.

En cuanto al proceso de formalización, el estudio identifica que uno de los principales problemas es la falta de liderazgo de la autoridad nacional para conducir el proceso de formalización, lo que implica la capacidad de generar estrategias que faciliten y viabilicen la implementación de cada una de las etapas del proceso, la supervisión a las entidades involucradas, comenzando por las Direcciones o Gerencias Regionales de Minería (GREM, DREM) quienes tienen la responsabilidad de implementar el proceso de formalización, así como de los recursos humanos, financieros y tecnológicos que permitan la trazabilidad de todo el proceso.

En cuanto al proceso mismo, se identificó que para inscribirse en el REINFO sólo deben manifestar su intención de formalizarse, pero una vez inscritos, no se filtra si realmente es minero artesanal o pequeño minero, no se corrobora inmediatamente si las coordenadas declaradas ubican a la zona de extracción del mineral en áreas permitidas por el Estado o no. Sobre éste punto, reportes del MINEM indicaron que se había identificado varias inscripciones en el REINFO que declararon coordenadas de extracción el mineral, en el mar y en Brasil, esto a modo de ejemplo.

Asimismo, se identificó que los plazos no se cumplen tanto para la presentación de los documentos requeridos por parte de los mineros informales, así como para la atención y respuesta de las entidades públicas que deben analizar y valorar los documentos presentados; de igual forma, cuando los mineros informales quieren hacer seguimiento a su trámite, no cuentan con una plataforma o sistema virtual que les permita saber cómo va el proceso y si deben subsanar algún documento, esto impide que se agilicen los procesos e identificar rápidamente a quienes no levantan las observaciones oportunamente y dar las alertas necesarias.

Otro de los puntos clave identificados, está relacionado con las salidas a campo para verificar lo que se ha declarado, no se cuenta con el equipo humano ni con los recursos necesarios para cumplir con ello; y, en cuanto a la fiscalización de todo el proceso, mucho menos, en el caso de los mineros informales suspendidos, la norma señala que deben dejar de extraer el mineral, sin embargo, no se cumple, ya que no se fiscaliza el cumplimiento de esta normativa y menos se sanciona.

Por todo ello, se puede afirmar que el proceso de formalización ha sido un fracaso, por lo tanto, ¿qué viene ahora? Lo primero, no dar espacio a abrir nuevamente el REINFO, es decir, que se incorporen más mineros informales, ya que el propio proceso, no permitirá la formalización. Y lo segundo, sí es importante avanzar con la formalización de la pequeña minería y minería artesanal, pero no con las reglas que se tienen actualmente.

Este 31 de diciembre, vence el plazo legal para culminar los procesos de formalización en el país. El Gobierno ha ofrecido desde el mes de julio del año en curso, una nueva Ley de Minería Artesanal y de Pequeña Escala – Ley MAPE, que hasta hoy no presenta. Los proyectos de Ley que se encuentran en el Congreso plantean abrir el REINFO y ampliar los plazos de formalización, sin ningún cambio. Lo que esperamos es que tanto el Gobierno Nacional como el Legislativo, prioricen la solución de este tema, y que los Gobiernos Regionales, que tiene a su cargo el proceso, no se mantengan en silencio, sino que tomen posición y propongan que se atienda con soluciones de corto, mediano y largo plazo la problemática de la minería informal.