EL FRANCÉS QUE ESCRIBIA CUENTOS

Por Julio Lopera Quintanilla.(*)
René Albert Guy de Maupassant, más conocido como Guy de Maupassant, es un escritor y poeta francés, el autor de geniales cuentos tiene también una producción novelística, además, escribió libros de viajes, obras de teatro, varias crónicas periodísticas sobre literatura francesa.
El escribidor que tuvo tres seudónimos a lo largo de su trayectoria artística: Joseph Prunier (1875), Guy de Valmont (1878) y Maufrigneuse (1881 – 1885), es uno de los más altos representantes del movimiento naturalista, uno de los mayores cuentistas de la Historia de la Literatura que tuvo la influencia de tres colosos: Balzac, Zola y Flaubert. Siguió el tránsito que va del relato de costumbres a la narrativa psicológica que cultivó en sus últimos años bajo la influencia de Paul Bourget.

Maupassant nació la madrugada del 5 de agosto de 1850 en tiempos de la Segunda República Francesa en el castillo de Miromesnil en Tourville – sur – Arques, a ocho kilómetros de Dieppe. Su padre se llamaba Gustave de Maupassant y su madre Laure Le Poittevin, una mujer muy preparada que introdujo al niño a temprana edad en el estudio de las lenguas; la madre quería que su hijo imitara a Alfred Le Poittevin, su tío quien era una verdadera promesa para la literatura, pero falleció muy joven. Alfred era amigo íntimo del gran Gustave Flaubert.
Cuando el pequeño Guy tenía solo doce años sus padres se separaron amistosamente, su padre engañaba a su esposa con otras mujeres. La ruptura afectó psicológicamente al niño, por ese motivo el pequeño se desvinculó de su progenitor y comenzó considerarse huérfano de padre.
Maupassant fue en los días de su juventud muy apegado a su madre, la cual al advertir el gran talento que el joven tenía por la literatura le presentó a Gustav Flaubert, que desde ese día fue su protector y figura paterna. Flaubert le presentó a Turgenév y a Zolá y, además, le abrió las puertas de varios diarios de la ciudad. Todo esto sucedió antes que el joven marchara a Ruan para estudiar en el liceo de dicha ciudad al que postuló después de haber estudiado en el Liceo Enrique IV (1859), en la Institución Eclesiástica Dyvetot (1863 a 1868) y en el Liceo Pierre Corneille (1868 a 1869).
Finalizada la guerra franco – prusiana de 1870, luego de la derrota francesa, Maupassant marchó a París con su padre para estudiar derecho. Durante la estancia de Guy de Mupassant en la capital francesa, la relación con su progenitor se deterioró mucho y la familia comenzó a atravesar serios reveses económicos, en este contexto, Maupassant tuvo que dejar sus estudios universitarios y comenzar a trabajar; en ese tiempo laboró en varios ministerios y publicó Bola de Sebo (1880); junto a ese cuento y bajo el mismo título incluyó trescientos cuentos. La obra es una composición literaria de corte realista escrita bajo la dirección de Flaubert, que fue calificada como una obra maestra por el mismo autor. Con esta, Maupassant consiguió una enorme notoriedad. Escribió también el cuento La Casa Tellier (1881), los Cuentos de la becada (1883), la novela Una Vida (1883), la novela El Collar (1884) la novela Ben – Ami (1885), la novela Fuerte como la muerte (1889).
La vida del escritor en París estuvo señalada por una gran creatividad literaria, a la par de su trabajo como funcionario público practicó el deporte del remo en varios pueblos de las afueras de Paris en compañía de personas que no siempre tenían muy buena reputación. Fue un hombre promiscuo que se entregaba con pasión irrefrenable al sexo y nunca conoció el amor verdadero. En su opinión el hombre que se contentaba con una sola mujer estaba al margen de las leyes de la naturaleza. Parece que el carácter dominante de su madre lo alejó de la posibilidad de tener una relación seria.
Solo pensar en el matrimonio era algo que le horrorizaba, fue misógino y misántropo de por vida. Además, las ideas de Arthur Schopenhauer su filósofo predilecto y las influencias de Gustav Flaubert hicieron del escritor un hombre muy pesimista.
Maupassant detestaba establecer relaciones sociales, no quería establecer ningún vínculo social, odiaba cualquier tipo de atadura, nunca quiso pertenecer al cenáculo de Zola ni a ninguna escuela o movimiento literario.

El escritor sufrió mucho, tuvo que afrontar varios problemas de salud: como la demencia, el pánico, los problemas nerviosos, la sífilis. Además, el consumo de cocaína y éter le produjeron alucinaciones y estados alterados de conciencia que contribuyeron a la creación de nuevas realidades en su obra fantástica y terrorífica, de hecho, sus cuentos son en buena parte la expresión de un hombre cuya razón se desintegra.
En su cuento Quien Sabe plasma muchos de sus grandes sufrimientos. Se conoce, además, que en una ocasión expresó: “tengo miedo de mí mismo, tengo miedo del miedo, pero, ante todo, tengo miedo de la espantosa confusión de mi espíritu, sobre todo de mi razón sobre la cual pierdo el dominio y la cual turbia un miedo opaco y misterioso”.
(*) Centro Cultural Unsa.
DATO
Después de tres intentos de suicidio frustrados, Guy de Maupassant fue internado en una clínica psiquiátrica de París donde falleció la noche del 6 de julio de 1893. Sus restos yacen en el cementerio de Montparnasse
Maupassant es el más grande Narrador Omniscientes que ha habido en la Historia de Literatura porque nunca se involucró en ninguna de sus historias. Rafael Llopis, conocido crítico literario, al referirse al narrador francés afirma: “Maupassant, perdido en la segunda del siglo XIX, se encontraba muy lejano ya del furor del Romanticismo, fue una figura singular, casual y solitaria. ¡Viva el poeta francés que escribía cuentos!.